La confusa sintonía política

¿Qué cabe preguntarse de un político y/ o de una fuerza política?

Por ejemplo:

  • ¿qué clase de país quiere? 
  • ¿cuál es su futuro más deseado, y por el cuál trabajaría?
  • ¿a quiénes incorpora en sus armados o construcciones?
  • ¿con qué actores sociales está en sintonía, con cuáles no?
  • ¿es consecuente con sus ideas o las cambió mucho a lo largo de su vida?
  • ¿los argumentos que plantea son sólidos y mantienen un hilo ideológico a lo largo de su carrera?
  • ¿entiende lo político con realismo, sabe de política, tiene nociones de gestión, puede integrar estas tres cosas?
  • ¿tiene un pensamiento a favor de lo público o el Estado sólo tiene que estar para garantizar los contratos desiguales entre privados? 
  • ¿qué idea tiene de la regulación estatal, cómo la concretó cuando tuvo ocasión?
  • ¿los equipos de laburo resisten un análisis serio?
  • ¿cómo vota cada fuerza en el congreso?

Una duda repetida es cómo puede ser que fuerzas muchas veces opositoras presenten los mismos objetivos: igualdad social, distribución del ingreso, educación pública de calidad, salud pública equipada, seguridad pública ciudadana e integral, independencia económica, soberanía política, justicia social, armonía de clases, una Latinoamérica integrada, rol del Estado activo, etcétera. 

Si tienen los mismos objetivos, quizá redactados de distintas formas, lo único que quedaría en discusión es quién y cómo pero no qué. Bueno, esto sería así en la medida que nadie mienta o esconda sus verdaderas intenciones, cosa que sería altamente probable.

Todo lo anterior surge de algo curioso: llama la atención que la militancia de Binner cante "Binner corazón acá tenés los pibes para la liberación", que es el mismo cantito que le hacen a Cristina. ¿Llama la atención? Pareciera que existen algunos puntos en común entre Binner y el Proyecto Nacional y Popular. Con el diario del lunes, ¿se podría pensar que puede haber una forma de cooptar y conducir a este socialismo (hoy electoralmente enfrentado al Proyecto Nacional y Popular)?

Por eso es difícil elegir al mejor para representarnos, porque se requiere una mirada realista y política de largo plazo, que los grandes medios de comunicación esconden u ocultan. Porque la gran mayoría plantea sus discursos sin transparencia (por ejemplo apoyando alegremente al campo sólo con fines electorales pero sin un proyecto político que le dé sustento). Eso obliga a ejercitar mejor las concepciones políticas por parte de la ciudadanía, a tener más gimnasia para entender quiénes nos representan mejor como sociedad. Si existe un desgaste social por las pujas políticas, los músculos de la comprensión política se relajan y las elecciones pasan a ser sólo un obstáculo para disfrutar un domingo en familia. Es preciso prestar atención a este proceso que puede lastimar la importancia de la política como tránsito obligado para el cambio social.



Quizá seamos muchos más los que queremos una sociedad justa de lo que cada partido expresa. Quizá habría que ponerse un poco en el lugar del otro para construir propuestas superadoras. Quizá el gran desafío es articular propuestas entre distintas fuerzas que tienen propósitos similares. Quizá es tiempo de guardar el peronómetro por dos años, o más. Es un debate a explorar.

Comentarios

Mauro A. dijo…
Disculpame, pero para mi, alguien que dice que va a "defender al campo" no puede querer distribución de la riqueza y justicia social, y mas por el significado ideológico que por la realidad misma de su significado. Ante eso, ¿cuantos movimientos políticos tienen mas o menos el mismo objetivo realmente?, ¿Con cuantos se podrá coordinar medidas que apunten al mismo rumbo?. No hay que olvidarse que hace menos de un año habia un grupo grande que decía querer beneficios para los jubilados con el aumento del haber mínimo, pero que cuando se rascaba un poquito la propuestas, te dabas cuenta que: o eran unos burros de circo demagogos, o tenían otro interes muy distinto al que pregonaban.

Pero en lineas generales estoy de acuerdo, el movimiento se debe ampliar, no contraer, pero es medio dificil encontrar gente que piense como uno vio....
Anónimo dijo…
estoy de acuerdo. El tema es que los otros se den cuenta que nosotros no somos el enemigo.
Anónimo dijo…
Hola Hernán:

Excelente post.

Tenemos mucho más en común de lo que se piensa pero es en el interés de los políticos "lideres" mantenernos divididos.
Sería un gran día cuando nos olvidamos de nuestros partidos, provincias, ciudades y equipos para convertirnos en Argentinos con diferentes sabores.

Todo lo mejor para vos.
Hache dijo…
Estoy de acuerdo con lo que decís Mauro, yo soy el primer talibán.

Pero a la luz de los resultados electorales es preciso adelantarse para seguir consolidando el proyecto nacional y popular, y apagar cualquier señal de debilitamiento.

Estaba estudiando la relación entre significante (el fonema), significado (el concepto en el imaginario) y referencia (el puente entre ambos).

Desde la oposición, con cierto aprovechamiento del cansancio de la sociedad por las pujas políticas (de la que de hecho sale favorecida en términos generales), se hace política desde el significante y la referencia pero se miente sobre los significados (ver campaña de Macri).

Sólo el gobierno rescata gran parte de estos significados en términos reales, pero es un boomerang en muchos casos porque la sociedad naturalmente (cada quien está en lo suyo) no puede ver (ni tiene por qué a decir verdad) la complejidad agonal de ciertos jugadores polítcos y económicos. Es parte de un debate a dar. Creo. Pero que lo hagan los intelectuales, ¿no?

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