Si el barco llega entero no lo van a poder hundir
Columna estelar del domingo en LN, Jorge Fernández Díaz:
Las negritas son mías. Pero se las presto. Todo bien.
Idea 2: la mejor forma de condicionar los años que van de 2015 a 2019 a favor de los sectores populares, es llegando con el barco a flote a 2015. Ya sea que haya continuidad del kirchnerismo o no. Pero sobre todo si no la hay. Si la economía llega entera, con no mucho desempleo más que ahora, 8 puntitos, 9 puntitos, sin llegar a los 2 dígitos, ponele, si el consumo no se resiente, si no hay más inflación que ahora, si el Estado aumenta 2 veces por año las jubilaciones, y la AUH dentro del marco de la inflación del supermercado, significaría que se llega con el barco entero. Y si llega entero no lo van poder hundir. Claro, ello requiere mucho trabajo. Porque si llega entero no van a querer pagar los costos políticos de hundirlo (destruyendo todo lo anterior). Porque el pueblo tiene memoria colectiva, vaya sino, y nadie va a querer quedar en esa memoria como un destructor social. Si llega mejor que como está ahora ni hablar.
Idea 3: "críticos posfacios de Alfonsín y Menem" dice el autor, y como decía un ex jefe ¿dónde querés que me ponga para cagarme de la risa? Como si la gobernabilidad fuera cosa sólo del gobernante. Depende del gobernante, pero también depende de la integridad o mezquindad de los demás actores. El final de Alfonsín (un gran presidente) estuvo signado por un golpe financiero conducido por los mismos sectores que ahora se quejan del kirchnerismo, salvando las distancias de poder de cada gobierno (poder justamente basado en los logros de cada uno en sus momentos de máxima fortaleza). El posfacio del neoliberalismo tuvo otros condimentos, y un gran dolor social previo, por supuesto. Pero en ambos casos hubo interrupción del mandato por falta de gobernabilidad, y no precisamente porque los presidentes así lo quisieran. En ambos casos llegó Duhalde. El mismo dirigente que ahora apoya (¿o conduce?) a Massa. En ambos casos, a la salida del alfonsinismo y del neoliberalismo, los grupos económicos locales recuperaron la fortaleza basada en el dominio de los resortes macroeconómicos. En ambos casos cambiaron "algunas cositas" para su beneficio y generando un inmenso dolor en el conjunto de la sociedad (allá por 1989/90 y 2001/2).
"No será juzgada por sus logros, que para la corta memoria colectiva siempre son pasajeros y olvidables, sino por la actitud que adopte en estos epílogos. Muchos de sus antiguos compañeros de ruta piensan que no querrá pagar el costo ni transformarse en un cadáver político. Dejarle una bomba de tiempo al próximo presidente tampoco parece apropiado: los escombros de 2001 no sólo enterraron a la Alianza, sino a su irresponsable antecesor. Tirar del mantel equivaldría a perder todo junto: poder, respeto, libertad y futuro. Tratar de hacer la plancha y seguir con los parches como si no pasara nada puede meterla en una espiral descendente y desangrarla hasta límites abismales. Esa administración de la decadencia amenazaría con perjudicar incluso a los peronistas disidentes que aspiran a sucederla y que se regocijan con que pague el asado pantagruélico que se comió, puesto que la sociedad podría asociar a todo el peronismo con su desgracia. En los críticos posfacios de Alfonsín y de Menem no les fue nada bien a los candidatos de sus propios partidos, que, aunque se presentaban con discrepancias y promesas de cambio, fueron repelidos por el electorado."
Las negritas son mías. Pero se las presto. Todo bien.
Algunas ideas que surgen de la lectura.
Idea 1: la memoria colectiva se acuerda del aguinaldo, de las vacaciones pagas, de la indemnización, de los momentos en los que el Estado asistió a los sectores trabajadores y/o vulnerables. Por mencionar las cosas buenas, porque también se acuerda de las malas. No sé qué quiere decir que es corta la memoria. No es así, el peronismo se basa en esa memoria. En esta etapa hay conquistas que quedarán en la memoria: Asignación Universal por Hijo, de las paritarias por encima de la inflación, del bajo desempleo, de la piecita nueva que construyeron de a poquito entre 2005 y 2008, de la que empezaron en 2011 y tienen a medio terminar. La memoria colectiva, como tantas cosas, depende de la organización del pueblo, y en esta etapa asistimos a una reorganización popular (intermedia, pero ésta es otra cuestión). Organización popular (consciencia, acción, conducción, etc.) que mejora los lazos sociales fundamentales para la consolidación política de una estructura social favorable a los sectores mayoritarios pero menos poderosos.
Idea 2: la mejor forma de condicionar los años que van de 2015 a 2019 a favor de los sectores populares, es llegando con el barco a flote a 2015. Ya sea que haya continuidad del kirchnerismo o no. Pero sobre todo si no la hay. Si la economía llega entera, con no mucho desempleo más que ahora, 8 puntitos, 9 puntitos, sin llegar a los 2 dígitos, ponele, si el consumo no se resiente, si no hay más inflación que ahora, si el Estado aumenta 2 veces por año las jubilaciones, y la AUH dentro del marco de la inflación del supermercado, significaría que se llega con el barco entero. Y si llega entero no lo van poder hundir. Claro, ello requiere mucho trabajo. Porque si llega entero no van a querer pagar los costos políticos de hundirlo (destruyendo todo lo anterior). Porque el pueblo tiene memoria colectiva, vaya sino, y nadie va a querer quedar en esa memoria como un destructor social. Si llega mejor que como está ahora ni hablar.
Por el contrario a esto, los sectores de la sociedad con poder económico interesados en un orden de acumulación diferente, los referentes del fin de ciclo, interesados en un Estado máximo pero ya no para intervenir y redistribuir sino para aceitar la mano invisible del mercado, que no es otra que la misma mano de esos sectores que ganan a costa de los demás, harán todo lo posible para que el barco llegue lo suficientemente dañado como para construir los argumentos sociales, colectivos, ideológicos y materiales que legitimen un cambio de barco. Un barco que se parezca más a un avión, más rápido pero donde entra menos gente. Por supuesto que no van a tocar la democracia en este contexto, porque no suma desde la legitimidad popular. Intentarán, buscarán provocar, que el dolor "sea causado" por el actual gobierno desde lo económico. La economía depende de las decisiones políticas.
Idea 3: "críticos posfacios de Alfonsín y Menem" dice el autor, y como decía un ex jefe ¿dónde querés que me ponga para cagarme de la risa? Como si la gobernabilidad fuera cosa sólo del gobernante. Depende del gobernante, pero también depende de la integridad o mezquindad de los demás actores. El final de Alfonsín (un gran presidente) estuvo signado por un golpe financiero conducido por los mismos sectores que ahora se quejan del kirchnerismo, salvando las distancias de poder de cada gobierno (poder justamente basado en los logros de cada uno en sus momentos de máxima fortaleza). El posfacio del neoliberalismo tuvo otros condimentos, y un gran dolor social previo, por supuesto. Pero en ambos casos hubo interrupción del mandato por falta de gobernabilidad, y no precisamente porque los presidentes así lo quisieran. En ambos casos llegó Duhalde. El mismo dirigente que ahora apoya (¿o conduce?) a Massa. En ambos casos, a la salida del alfonsinismo y del neoliberalismo, los grupos económicos locales recuperaron la fortaleza basada en el dominio de los resortes macroeconómicos. En ambos casos cambiaron "algunas cositas" para su beneficio y generando un inmenso dolor en el conjunto de la sociedad (allá por 1989/90 y 2001/2).
Comentarios
1)La de máxima: que el barco se vaya al cuerno y de paso se clausura la tercera experiencia populista
2) La de mínima: que CFK se haga cargo del ajuste evitándole el costo a los encargados de la "restauración"
Pero para FD, a pesar de todo y los disimulos, CFK todavía cuenta con margen de discrecionalidad para llegar a puerto aunque sea por la impresión de que la muerte política no está en los planes de Cristina, y que pasado el Rubicón de la verdad, enfrentada a la historia, puede evaluar una nueva epopeya: irse por la puerta grande"
Saludos
Y después de 18 años durísimos y complicados, lo volví a ver a partir de 1975/76. Y esta vez con muchos más muertos.
El poder real no repara en medios para conseguir sus fines espantosos.
Hoy lo vemos en varios puntos de Europa, cuyo estado de bienestar constituía motivo de envidia.
Pero faltan más de dos años para la finalización del TERCER MANDATO del FPV. Aún hay mucho por hacer y profundizar. La emergencia de los K en 2003, ante las dudas y la desconfianza de millones de argentinos, constituye la única real muestra de fuerza política popular de los últimos 60 años.
Saludos
Veamos esto:
la memoria colectiva se acuerda del aguinaldo, de las vacaciones pagas, de la indemnización, de los momentos en los que el Estado asistió a los sectores trabajadores y/o vulnerables. Por mencionar las cosas buenas, porque también se acuerda de las malas.
Típica letanía peronista, una pregunta ¿en qué país más o menos parecido a la Argentina (o mejor socioeconómicamente) la gente no tienen aguinaldo, vacaciones, etc, etc? ¿Qué pasó en TODOS esos países? ¿vino algún general a ocuparse de los pobres?
¿Se entiende? hasta en Brasil tienen "asignaciones por hijo"... también Estados Unidos o Inglaterra.
La irresponsabilidad de este gobierno la vamos a pagar muy cara, estamos en una situación de insolvencia muy seria, la crisis energética es total, la Argentina productiva no tiene resto para crecer, la infraestructura es un desastre... pero claro, el gobierno manijeó el consumo TODOS estos años, al punto de revivir el proceso inflacionario, se nos viene la noche.
Parece que 10 años ahora es mucho para no haber hecho algunas cosas pero poco como muestra que podemos vivir para siempre con un Estado que promueva los sectores vulnerables.
Y sabes qué pienso? Que no es poco, que con voluntad política puede haber inclusión para siempre... quedó demostrado.
http://www.lanacion.com.ar/1612232-como-sera-la-politica-economica-del-cristinismo-hasta-2015