Poder adquisitivo, La-La-La Nación
En La Nación de hoy salió este baremo de cosas que hay que hacer desde un nuevo gobierno.
Hay muchas cosas que llaman la atención, pero la más notable es que se señala que los salarios son altos respecto de la región, y que el empleo privado en blanco sube desde 2009, el empleo total (incluyendo no registrado) también sube, y el empleo público, que en términos macro también es una forma de redistribuir el ingreso (sé que es polémico esto que digo, y todos sabemos por qué), también creció. No suena a bomba de tiempo para la gente.
¿Qué pasa ahora?
Posiblemente se ajusten un montón de cosas. En resumen, vamos hacía un esquema bastante noventista pero sin convertibilidad (no habrá caja de conversión y tipo de cambio fijo), eso resultará en algo similar a la Alianza Pacífico. Lo más probable es que una masa salarial más baja como porcentaje de toda la economía redunde en menos gasto de las familias, menos ingresos en proporción -reales- para el Estado y menos gasto público (como porcentaje del PBI). Por tanto, una baja de la demanda efectiva, ya que se supone que las inversiones no van a compensar la baja del consumo, va a generar un desempleo más alto, y eso hará difícil sostener los niveles de pobreza, ni mucho menos mejorarlos. Nada quita que con las políticas correctas, de todos modos pueda mejorarse el nivel de indigencia. Ni tampoco nada quita que si no hay desbordes concentradores, pueda haber políticas correctas para desarrollar algún sector industrial. Es optimista, pero cabe suponer que algo se va a tener que dar al país en los próximos años, para tener legitimidad, algo del plan Scioli podría tomarse en cuenta para esto.
Todo está abierto. De momento este gráfico que armó FIEL sirve para derribar el mito de no se mejoró el empleo en estos 4 años, y el mito de los malos salarios.
La inflación, como ya se dijo, es una consecuencia de la puja distributiva, donde no siempre ganan los mismos, por supuesto. Es un indicador de falta de consenso distributivo y de mejora en el poder de los que quieren ganar más. Por eso, ahora se viene una nueva época de inflación, porque se cumplen estas dos cosas, pero se invierte el sujeto que quiere ganar más y el que mejora su poder relativo (el gran empresario, con mención en los exportadores). Eso sí, cuando la inflación es para mejorar ingresos de los sectores capitalistas, y si el Estado defiende esa situación, en algún momento llegan a un punto de concentración cómodo que disminuye la inflación, porque el empresario no puede ganar más relativamente y el sector popular no tiene poder. Habrá que ver cómo juega la conflictividad sindical y si un mayor desempleo frena el poder obrero. Veremos.
Hay muchas cosas que llaman la atención, pero la más notable es que se señala que los salarios son altos respecto de la región, y que el empleo privado en blanco sube desde 2009, el empleo total (incluyendo no registrado) también sube, y el empleo público, que en términos macro también es una forma de redistribuir el ingreso (sé que es polémico esto que digo, y todos sabemos por qué), también creció. No suena a bomba de tiempo para la gente.
¿Qué pasa ahora?
Posiblemente se ajusten un montón de cosas. En resumen, vamos hacía un esquema bastante noventista pero sin convertibilidad (no habrá caja de conversión y tipo de cambio fijo), eso resultará en algo similar a la Alianza Pacífico. Lo más probable es que una masa salarial más baja como porcentaje de toda la economía redunde en menos gasto de las familias, menos ingresos en proporción -reales- para el Estado y menos gasto público (como porcentaje del PBI). Por tanto, una baja de la demanda efectiva, ya que se supone que las inversiones no van a compensar la baja del consumo, va a generar un desempleo más alto, y eso hará difícil sostener los niveles de pobreza, ni mucho menos mejorarlos. Nada quita que con las políticas correctas, de todos modos pueda mejorarse el nivel de indigencia. Ni tampoco nada quita que si no hay desbordes concentradores, pueda haber políticas correctas para desarrollar algún sector industrial. Es optimista, pero cabe suponer que algo se va a tener que dar al país en los próximos años, para tener legitimidad, algo del plan Scioli podría tomarse en cuenta para esto.
Todo está abierto. De momento este gráfico que armó FIEL sirve para derribar el mito de no se mejoró el empleo en estos 4 años, y el mito de los malos salarios.
La inflación, como ya se dijo, es una consecuencia de la puja distributiva, donde no siempre ganan los mismos, por supuesto. Es un indicador de falta de consenso distributivo y de mejora en el poder de los que quieren ganar más. Por eso, ahora se viene una nueva época de inflación, porque se cumplen estas dos cosas, pero se invierte el sujeto que quiere ganar más y el que mejora su poder relativo (el gran empresario, con mención en los exportadores). Eso sí, cuando la inflación es para mejorar ingresos de los sectores capitalistas, y si el Estado defiende esa situación, en algún momento llegan a un punto de concentración cómodo que disminuye la inflación, porque el empresario no puede ganar más relativamente y el sector popular no tiene poder. Habrá que ver cómo juega la conflictividad sindical y si un mayor desempleo frena el poder obrero. Veremos.
Fuente: FIEL/La Nación |
Comentarios
El tema es que para aplicar este tipo de régimen tienen que arreglar en forma "la pesada herencia"....
Y buehhhh.... ahora la posta la tienen ellos, se analizarán los resultados en los sectores que nos interesan y veremos.
Lo que habría que descontar es que cualquier proyecto de industrialiación quedaría, en el mejor de los casos, congelado hasta nuevo aviso, lo cual supone un retroceso
Saludos cro.
Te aviso algo: la mentira K ya murió, el viejo truco de contar a los planes sociales como empleo en blanco es cosa del pasado.... y el empleo en cooperativas truchas como empleo privado también.
Ustedes perdieron porque la economía no crece desde hace 4 años, así de fácil, y si la economía no se cayó a pedazos es porque decidieron reventar las reservas hasta el último mango incluido el swap chino, deuda emitida por YPF y vaya a saber uno cuantas cosas más, de no haber sido por eso el ajuste de Dilma en Brasil comparado con el nuestro sería un juego e niños.
Mirá cómo de despide Kreti de la presidencia:
En el último día de Cristina, el Gobierno le entrega al Central un bono de US$ 3588 millones a cambio de reservas
No dejaron ni pelusas en el bolsillo.
No es así flaco, si te gustan tanto los pobres armá una cooperativa de trabajo y practicá la justicia social desde adentro, después me contás.