Punto para el IPCNu
Viendo las tapas de hoy de los principales medios opositores de la Argentina, se puede decir que el IPCNu del Indec, logró otra buena recepción, en su segunda medición (febrero 2014: 3,4%).
Con lo cual ya podríamos dejar de hablar del termómetro y volver a hablar de las causas principales. De cuyo debate se puede esclarecer y definir el tema para ver a dónde nos conviene ir con todo esto.
No te interesa lo que dice la prensa (supongo por tanto, que tampoco te interesaba antes), muy bien, acá está la nota metodológica para ver cómo se calcula y pondera el IPCNu, supongo que es una lectura mínima antes de criticarlo.
Una reflexión final.
No hay dudas que todo gobierno puede equivocarse. Algunos pensaremos que con el cálculo del IPC desde 2007, no se equivocó, otros pensarán que sí. En este último caso, para los que piensen así (porque indican que no medir bien la fiebre la hace aumentar), creo que lo importante es discernir entre un gobierno que se equivoca en la búsqueda de un país desarrollado, con un Estado fuerte en la conducción de la economía para la equidad y la distribución del ingreso, y otra muy distinta es estar acertado en la búsqueda de un país vinculado con negocios locales y transnacionales, sin atender la inclusión social.
En el primer caso el desarrollo será a los tumbos, con problemas, como no puede ser de otra manera, ni siquiera está claro que haya un camino fácil, en el cual el desarrollo con equidad sea defendido por los ganadores hasta antes de la equidad. Gobernar para el desarrollo es lidiar con esto.
En el segundo caso, el éxito supone el crecimiento de los ganadores de siempre, pero ningún o un mínimo derrame para los perdedores. Esto no visibiliza sectores nuevos que ganan espacio en la distribución del ingreso y la riqueza, y por tanto pone un velo sobre la realidad, sobre la grieta, que genera una sensación de orden social que no es tal.
Con lo cual ya podríamos dejar de hablar del termómetro y volver a hablar de las causas principales. De cuyo debate se puede esclarecer y definir el tema para ver a dónde nos conviene ir con todo esto.
No te interesa lo que dice la prensa (supongo por tanto, que tampoco te interesaba antes), muy bien, acá está la nota metodológica para ver cómo se calcula y pondera el IPCNu, supongo que es una lectura mínima antes de criticarlo.
¿Los datos? Estos.
No hay dudas que todo gobierno puede equivocarse. Algunos pensaremos que con el cálculo del IPC desde 2007, no se equivocó, otros pensarán que sí. En este último caso, para los que piensen así (porque indican que no medir bien la fiebre la hace aumentar), creo que lo importante es discernir entre un gobierno que se equivoca en la búsqueda de un país desarrollado, con un Estado fuerte en la conducción de la economía para la equidad y la distribución del ingreso, y otra muy distinta es estar acertado en la búsqueda de un país vinculado con negocios locales y transnacionales, sin atender la inclusión social.
En el primer caso el desarrollo será a los tumbos, con problemas, como no puede ser de otra manera, ni siquiera está claro que haya un camino fácil, en el cual el desarrollo con equidad sea defendido por los ganadores hasta antes de la equidad. Gobernar para el desarrollo es lidiar con esto.
En el segundo caso, el éxito supone el crecimiento de los ganadores de siempre, pero ningún o un mínimo derrame para los perdedores. Esto no visibiliza sectores nuevos que ganan espacio en la distribución del ingreso y la riqueza, y por tanto pone un velo sobre la realidad, sobre la grieta, que genera una sensación de orden social que no es tal.
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