Fuga de capitales. Activos externos en el exterior. Siguen los desafíos
Según un paper del CEFID-AR (La Fuga de capitales), escrito por Jorge Gaggero, Claudio
Casparrino y Emiliano Libman,"buena parte del aumento de los activos de
residentes en el exterior no ha sido resultado de un fenómeno “normal” en
una economía en crecimiento y vinculación virtuosa con el mercado mundial…
sino del drenaje de recursos generados localmente que… hubieran podido utilizarse
–en gran medida- a favor del fortalecimiento del entramado económico
y productivo local”.
La fuga de capitales se vincula con la tenencia de
activos externos de residentes de una nación. Supone un drenaje de recursos que
podrían ser utilizados para potenciar el crecimiento económico, el consumo
y el trabajo, puede vincularse asimismo con alguna especulación contra la
economía local.
La salida de capitales en la
Argentina es constante, no se detiene ni siquiera en los momentos de recesión,
eso porque esta salida de capitales depende mayormente de la cúpula empresaria,
y las ganancias de esta cúpula, como se sabe, son independientes del ciclo de
la economía: gana siempre. Tanto en 2001 ó 2002 como en 2009 o 2012, años en
los que no creció la economía, las salidas de capitales del sistema no
detuvieron su crecimiento.
A pesar de las medidas adoptadas por
el gobierno, en los primeros nueve meses de 2012 no se logró frenar la salida
indiscriminada de capitales. Por lo tanto la política cambiaria, en este
sentido, todavía muestra un gran desafío para los intereses del conjunto de la
sociedad argentina, de acuerdo con el texto de CEFID-AR citado: la fuga de
capitales perjudica el desarrollo económico y social de la sociedad. Existen
varios elementos en puja vinculados con este dólar sin shocks devaluatorios y con
restricciones cambiarias: evitar que la inflación se espiralice en función de
los precios externos, facilitar alguito la tarea del Estado como protagonista
de la inclusión social (con más inflación sería más difícil), controlar las
corridas especulativas contra el peso y la estabilidad del sistema, sostener el
control del Estado sobre la política cambiaria integrada a la política fiscal y
comercial.
Gráfico: activos externos del sector
no financiero en millones de dólares y variación del PBI real.
Fuente: elaboración propia en base a
INDEC y Programación Económica (Mecon).
La variación entre el tercer
trimestre de 2012 y el tercer trimestre de 2011 respecto del stock de activos
externos del sector privado no financiero aumentó un 9% (superior a la misma
variación de 2011 contra 2010, 8,5%, y a la de 2010 sobre el año anterior,
6,5%). En el contexto actual, es muy posible que esto refleje las preferencias
de atesorar divisas en cajas fuertes o en otros sitios fuera del sistema
financiero argentino.
En los años 1995, 1999, 2003, 2007 y
2011 se aceleran las salidas de capitales. Lo mismo que ocurre
-procíclicamente- en los años de crisis como 2002 ó 2009. En el mismo sentido,
Zaiat, en su reciente libro (Economía a
Contramano), da cuenta de 6 corridas bancarias desde 2007 a 2011 que suman
más de U$S60.000 millones. Existe, entonces, una evidente especulación contra
el peso que sin ninguna duda responde a intereses que buscan controlar las
acciones del Estado. Este es el escenario que se busca modificar con los
controles sobre el dólar, y demás medidas.
Desde 2003 hasta la actualidad, los
activos en el exterior crecieron un 71%, desde U$S118.008 millones hasta U$S201.935
millones. Sin embargo, gracias al crecimiento del PBI en dólares; en 2003 los
activos externos se correspondían con el 92,1% del PBI mientras que en la
actualidad se redujo a una correspondencia del 43% del PBI.
La relación entre los activos
externos y el PBI corriente en dólares muestra un pico del 105% en 2002, tras
la devaluación del peso. Y un descenso que encuentra su mejor momento en junio
de 2011 con 37,7%. Actualmente, se vislumbra un rebote de este indicador hasta
el 43%.
Gráfico: activos externos del sector
no financiero (en dólares) sobre el PBI (medido en dólares corrientes).
Fuente: elaboración propia en base a
INDEC y Programación Económica (Mecon).
Este tema es fundamental porque afecta directamente
a la estabilidad financiera del sistema económico de la Argentina, pero
asimismo, se vincula directamente, como lo ha demostrado nuestra historia, con
la estabilidad y la soberanía políticas. Por tanto, hacia delante será
necesario monitorear cómo evoluciona esta cuestión, tras las importantes
medidas tomadas en la materia. Cabe suponer que sin estas medidas la fuga habría sido mayor, pero no es fácil de verificar. Por supuesto, se precisa mucha creatividad para seguir
deteniendo la salida de capitales del sistema. Las restricciones puestas a la
venta de dólares, la nueva carta orgánica del BCRA y la nueva Ley para
controlar el mercado de capitales, son herramientas imprescindibles en este
sentido, aunque no suficientes en sí mismas, por lo visto.
Comentarios
Ustedes los economistas no ven una positiva, son todas palidas contra este gobierno nac&pop