Tensión entre administración y política. Caso Massa
No esta difícil, me parece a mí, ser intendente de un distrito. Una vez que llegaste, claro. Llegar es casi imposible, pero cuando llegas, consolidas, derecho viejo. Fijate sino.
No hay exposiciones ideológicas. Una vez que llegaste, ya tenes el apoyo electoral, con eso te podes sentar a discutir más o menos en orden con los distintos actores del municipio. Y discutir es negociar.
No precisas hacer grandes definiciones políticas. Con hacer esas cosas con las que todos están de acuerdo estamos bien. O por lo menos no estamos peor.
Arreglar una vereda, arreglar una calle, hacer cloacas, levantar la basura (!), o cualquier cosa, está bien. Cero conflicto político, bueno un poco siempre, pero nadie puede decir que está mal que hagas eso. No se precisa política para hacer las cosas bien con las que todos estamos de acuerdo, sino administración. Se precisa política cuando hay conflicto, cuando hay menos acuerdo.
Un intendente está más cerca de un administrador de consorcios, que un presidente. El presidente toma decisiones macro: hacer una cosa es posible que choque con hacer otras. Subsidiar el consumo interno te enfrenta con los exportadores, por ejemplo. Eso en un municipio no pasa.
Pero que haya una forma pragmática de hacer cosas y ocultar la política, no quiere decir que no exista una concepción ideológica. Atenti, porque ésta es la idea fuerza del post.
En un municipio las críticas más fuertes vienen por el lado de lo que no se hace. Salvo que seas como Macri, el jefe de gobierno porteño hizo incluso conferencias de prensa para oponerse al gobierno nacional. Un gato, no entendió nada y ahora paga las consecuencias. En cambio tanto los varones como Massita entendieron que no es preciso salir del pragmatismo, quedarse ahí, en esa trinchera de "consenso".
Gráfico (click para agrandar): volumen de hogares SIN (2010)
El pragmatismo te protege, no precisas pelearte ni con empresarios ni con nadie. Por eso le jode tanto a Massa tener gente del PRO, porque la CABA es un municipío ideológico, ¿no? Todos lo sabemos. Eso desprotege. Esto último es una zoncera, en realidad eso visibiliza. Ojota. En este sentido está bien. Se muestran como son. Eso está bueno: si estás a favor de que haya empresas nacionales como YPF o si estás a favor de Fútbol para Todos no votas al PRO, clarísimo.
La manifestación de ideas nos protege a todos nosotros. Porque como decía Recalde hoy en una entrevista lo importante es que se diga qué se piensa hacer, sin mentirle al electorado. Pero claro, no es la misma verdad la que puede manifestar un gobernador provincial, un intendente, o un/a presidente/a.
En algunas cosas estamos todos de acuerdo, en otras hacer una cosa implica dejar de hacer otras, las políticas nacionales que han generado polémica en general tocan intereses por cuanto hacerlo de una forma u otra resulta en ganadores y perdedores. Y ahí estamos.
Pero hay algunas cosas que podemos saber: durante 2012 Tigre subejecutó el presupuesto de la Secretaría de Política Sanitaria y Desarrollo Humano en un 44%, y asimismo subejecutó el de Inversión Pública y Planeamiento Urbano en un 40%. El resto de las Secretarías parece que ejecutaron el 90%. Detrás de esta mala gestión es posible que haya ideología, pero si no hay ideología, de todos modos sí hay una desidia que afecta el pragmatismo sobre el cual debe montarse una buena gestión. Y gestionar de una forma u otra responde a la voluntad del dirigente. Especialmente después de varios años, cuando los resortes son más fácil de entender y dominar. En la administración por tanto hay política. Esconderse detrás del pragmatismo es una zoncera que debe salir a la luz.
Visibilizar u ocultar. De eso se trata esta campaña. Y parece muy positivo que emerja en la vidriera la gestión distrital, porque es el primer escalón de contacto entre el ciudadano y la gestión, la administración y la política.
No hay exposiciones ideológicas. Una vez que llegaste, ya tenes el apoyo electoral, con eso te podes sentar a discutir más o menos en orden con los distintos actores del municipio. Y discutir es negociar.
No precisas hacer grandes definiciones políticas. Con hacer esas cosas con las que todos están de acuerdo estamos bien. O por lo menos no estamos peor.
Arreglar una vereda, arreglar una calle, hacer cloacas, levantar la basura (!), o cualquier cosa, está bien. Cero conflicto político, bueno un poco siempre, pero nadie puede decir que está mal que hagas eso. No se precisa política para hacer las cosas bien con las que todos estamos de acuerdo, sino administración. Se precisa política cuando hay conflicto, cuando hay menos acuerdo.
Un intendente está más cerca de un administrador de consorcios, que un presidente. El presidente toma decisiones macro: hacer una cosa es posible que choque con hacer otras. Subsidiar el consumo interno te enfrenta con los exportadores, por ejemplo. Eso en un municipio no pasa.
Pero que haya una forma pragmática de hacer cosas y ocultar la política, no quiere decir que no exista una concepción ideológica. Atenti, porque ésta es la idea fuerza del post.
En un municipio las críticas más fuertes vienen por el lado de lo que no se hace. Salvo que seas como Macri, el jefe de gobierno porteño hizo incluso conferencias de prensa para oponerse al gobierno nacional. Un gato, no entendió nada y ahora paga las consecuencias. En cambio tanto los varones como Massita entendieron que no es preciso salir del pragmatismo, quedarse ahí, en esa trinchera de "consenso".
Gráfico (click para agrandar): volumen de hogares SIN (2010)
El pragmatismo te protege, no precisas pelearte ni con empresarios ni con nadie. Por eso le jode tanto a Massa tener gente del PRO, porque la CABA es un municipío ideológico, ¿no? Todos lo sabemos. Eso desprotege. Esto último es una zoncera, en realidad eso visibiliza. Ojota. En este sentido está bien. Se muestran como son. Eso está bueno: si estás a favor de que haya empresas nacionales como YPF o si estás a favor de Fútbol para Todos no votas al PRO, clarísimo.
La manifestación de ideas nos protege a todos nosotros. Porque como decía Recalde hoy en una entrevista lo importante es que se diga qué se piensa hacer, sin mentirle al electorado. Pero claro, no es la misma verdad la que puede manifestar un gobernador provincial, un intendente, o un/a presidente/a.
En algunas cosas estamos todos de acuerdo, en otras hacer una cosa implica dejar de hacer otras, las políticas nacionales que han generado polémica en general tocan intereses por cuanto hacerlo de una forma u otra resulta en ganadores y perdedores. Y ahí estamos.
Pero hay algunas cosas que podemos saber: durante 2012 Tigre subejecutó el presupuesto de la Secretaría de Política Sanitaria y Desarrollo Humano en un 44%, y asimismo subejecutó el de Inversión Pública y Planeamiento Urbano en un 40%. El resto de las Secretarías parece que ejecutaron el 90%. Detrás de esta mala gestión es posible que haya ideología, pero si no hay ideología, de todos modos sí hay una desidia que afecta el pragmatismo sobre el cual debe montarse una buena gestión. Y gestionar de una forma u otra responde a la voluntad del dirigente. Especialmente después de varios años, cuando los resortes son más fácil de entender y dominar. En la administración por tanto hay política. Esconderse detrás del pragmatismo es una zoncera que debe salir a la luz.
Visibilizar u ocultar. De eso se trata esta campaña. Y parece muy positivo que emerja en la vidriera la gestión distrital, porque es el primer escalón de contacto entre el ciudadano y la gestión, la administración y la política.
Comentarios
Otro si digo, el número de camas hospitalarias según lo que dice Mss Magoo es un tercio de las necesarias según la OMS, es decir hay 120 para alrededor de 380000 habitantes, y se estima necesarias una cada mil habitantes, mientras demostrás que el presupuesto del área correspondiente se subejecutó.
Nosotros somos Ella, abrazos
Lo que me parece bastante idiota es venderle a "laggente" que un orgánico territorial puede resolver acertadamente cuestiones muy por encima del mostrador vecinalista.
Creo que se la subestima por que la población tiene en claro que cosas corresponden a un intendente y cuáles a una instancia superior. A mi entender, sabe diferenciar los roles y consecuentemente las responsabilidades.
Pero bueno.. siempre hay un roto para un descocido, como dicen
Saludos